Entre los factores que afectan al desempeño de los cultivos, los picos de temperaturas máximas y radiación solar se encuentran entre los más frecuentes y condicionantes en la actualidad. El aumento de evapotranspiración y la deshidratación de los tejidos, junto con la caída de frutos o la devaluación comercial de éstos al presentar marcas originadas por la exposición solar, son solo algunas de las consecuencias asociadas a este tipo de condiciones ambientales. Una buena nutrición y bioestimulación pueden ayudar a minimizar estos daños aumentando la rentabilidad de dichos cultivos.
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